jueves, julio 23, 2009

El extraño fichaje de Ibrahimovic


Ahora que parece que la cosa se oficializa, tiene sentido dar mi opinión sobre el fichaje de Ibrahimovic por el Barcelona.

Demos por buena la cifra de 45 millones de euros, más Eto´o, más la cesión de Hleb y analicemos:

La marcha de Eto´o probablemente fuera necesaria. Yo así lo dije al final de la pasada temporada. Confiar en otro gran año del camerunés era complicado. Otra cosa es que el Barcelona no haya sabido negociar su precio de mercado. En un mundo donde Roque Santa Cruz cuesta 20 millones de euros, Benzema, 36 y Villa, unos 50, el precio de Samuel tendría que ser muy alto: doble campeón de Europa marcando en ambas finales, decisivo en el equipo del triplete y autor de 31 goles en la liga española.

Eso, amigos, son credenciales: cinco años en el Barça, con tres ligas, dos Champions y una Copa del Rey. 28 años. No es un abuelo, precisamente.

Sin embargo, Begiristáin se ha empeñado en regalarlo. Un trueque con Ibrahimovic -que, como delantero centro, aún no ha demostrado la misma eficacia que Eto´o- hubiera sido algo sensato por cuestiones de vestuario, de acuerdo. Pero cambiarlos y además pagar esa pasta me parece ridículo. Incluso la cesión de Hleb me escama. Sé que jugó un año horrible, pero el bielorruso es un excelente jugador que explotará en cualquier momento.

Aparte del precio, la idioneidad de Ibrahimovic es discutible. En mi opinión, el Barça necesita un definidor arriba. Ya tiene gente que juega muy bien al fútbol y que hace que el balón llegue arriba. Una vez ahí hay que meterla sí o sí. Eso Samuel lo hacía muy bien. Villa lo hubiera hecho de maravilla. No es sólo que el Barcelona marcara más de 150 goles el año pasado, es que se dejó otros 150 en oportunidades perdidas.

El recuerdo -vago- que tengo de Ibrahimovic es el de un delantero con una calidad técnica brutal, un gran manejo del cuerpo, buen juego aéreo, colaboración en el juego pero con poca capacidad de sacrificio -Villa hubiera dado ese extra- y problemas en la definición, o al menos, nunca ha sido un jugador que destaque por su capacidad goleadora. De acuerdo en que es un ganador: creo que ha ganado los últimos cinco Scudettos en Italia, con Juventus e Italia, pero tampoco sé si eso es del todo bueno. Un campeón necesita gente hambrienta.

Honestamente, no entiendo por qué pueden gastarse ese dineral en el sueco y no en Villa. Y creo que lo echarán de menos. También entiendo que entre la opinión de Guardiola y la mía, los seguidores del Barça lo tendrán claro, pero en fin, tenía que decirlo...