martes, julio 12, 2011

Haz de percepciones

Por ejemplo, yo me acuerdo de que me levanté a eso de las tres y media de la madrugada y me puse a ver el Argentina-Costa Rica por ver si Messi mojaba. Recuerdo incluso el insomnio anterior, la visita al cuarto de baño y un sueño muy corto y difuso en el que Luis Suárez -Luisito Suárez, el del Barça y el Inter- hablaba como ex-entrenador del Real Madrid.

Me acuerdo de haber cerrado la ventana y ponerme delante del ordenador, zombi, a escuchar los comentarios de YouTube mientras leía informes sobre el riesgo de la deuda en España, Italia y Grecia. La sensación de que esto se venía abajo y a mí me iba a pillar despierto, ojeroso, convulso. Había sido uno de esos sueños de los que necesitas despertarte todo el rato, sin una razón precisa, solo cuestión de ansiedad y angustia.

Recuerdo un gol de Agüero y otro gol de Di María pero no recuerdo irme a la cama, eso no. Supongo que me fui a la cama cuando acabó el partido y me dormí sin demasiadas dificultades porque hoy me he levantado allí, a las nueve de la mañana, listo para entrevistar a Balagueró. El problema de todo esto es que son suposiciones y recuerdos, es decir, todo esto sé que ha pasado, lo puedo calcular, pero me cuesta sentirlo, como si no hubiera una continuidad en mis sensaciones.

No sé desde cuándo pasa, pero pasa. Creo que viene de largo porque la mayoría de mis recuerdos intensos tienen que ver con Veruca Salt o Hole pero muy poco con Lori Meyers. Si hago el esfuerzo, sí, pero es como ver fotografías: el que está ahí eres tú, lo sabes, pero a la vez no eres tú: tú estás viendo las fotos, observando. Bueno, pues eso.